Las pericias realizadas a Liliana Montenegro no pueden determinar que haya estado embarazada ni que haya parido, según consta en el parte de prensa enviado por la Fiscalía General. Mientras el informe médico forense realizado en julio pasado indicaba que existían "signos indicativos que Liliana Montenegro cursó un embarazo reciente”, cuatro meses después se enfatiza que la documentación tenida en cuenta en la primera pericia médica "fueron las certificaciones escritas de los médicos que la asistieron", y "son ellos quienes deberán con rigor científico ratificar o rectificar sus conclusiones”.
La fiscal Lorena Aronne señaló que la junta ampliatoria que habían solicitado al Tribunal Superior de Córdoba se expidió respecto de los dos puntos ampliatorios que había requerido la fiscalía y explicó: “Las médicas respondieron que, atento a las características fisonómicas de la señora (Montenegro), luego de 45 días de haberse realizado eventualmente el parto, no podían dar certezas de embarazo y menos aún de parto".
Desde la fiscalía se informó que los últimos estudios son una respuesta del informe ampliatorio del Área de Servicios Judiciales, firmado por las doctoras Liliana Morán y Perla Wior. En tanto, las fiscales del caso, habían solicitado ampliación de los informes porque a pesar del primero, realizado en Córdoba, distintos profesionales salieron a contradecir que la mujer haya estado embarazada.
Lo cierto es que a esta hora el caso atraviesa por una incertidumbre enorme, sin certezas de embarazo ni parto pero tampoco la capacidad de descartarlos categóricamente a ambos. Los mellizos, a quienes Montenegro llamó Aurora y Agustín, no sólo no se sabe dónde están, sino que ahora pesa la duda de si efectivamente nacieron y esto hace peligrar el avance de la causa.