No fue una semana sencilla para Marcela Tauro. El miércoles, tras el desplante que le hizo en vivo Jorge Rial durante su descargo en "Intrusos", la periodista volvió a sentirse incómoda cuando Luis Ventura tomó la palabra para referirse al bebé que tuvo junto a la vedette Fabiana Liuzzi.
Esas situaciones hicieron que se ausentara del programa el jueves y surgieran todo tipo de especulaciones sobre una posible salida de la periodista del programa de chimentos. Sin embargo, al día siguiente volvió a ocupar su silla en el panel sin dar explicación alguna.
El fin de semana, Tauro eligió romper el silencio en el ciclo radial que conduce junto a Marcelo Polino."Los que me conocen saben que soy buena ariana: o te contesto o me pongo sensible. Si no te puedo contestar, por adentro empiezo a llorar", contó en referencia al momento en que Rial la paró en seco cuando ella quiso hacer una pregunta. "Jorge me pidió perdón. Pregunté porque pensé que se podía, mientras que él hacia su descargo, y no tendría que haber intervenido. Me metí para preguntarle sobre lo que había dicho en Gente, no me acuerdo. Me quedé bloqueada y me puse mal. En el corte me pidió disculpas. Yo me fui al baño, le dije 'andá a cagar', pero no me acuerdo porque me puse nerviosa".
Con respecto a lo vivido durante el descargo de Ventura, Tauro contó que ya venían "con un día cargado" y que, antes de salir al aire, una productora se acercó para avisarle que iba a hablar el periodista. "Me dijo: 'Como sos un referente femenino importante, estás sensible y no quiere que opines'. Estoy enojada conmigo de no haber agarrado la cartera, haberme cambiado y decir: 'Chicos, vengo mañana'. Respeté hasta donde pude lo que me habían pedido, pero no aguanté más", aseguró.
"Al otro día no fui porque estaba angustiada", reconoció.Sobre su cruce con Ventura, la periodista explicó: "No me acuerdo qué dije, hubieron términos [de Ventura] que no me gustaron. Encima él se pone a contar que el nene era de 32 semanas y a mí me removió todo porque era la misma historia que tuve con mi hijo, Juan Cruz. Él dijo que no le podían sacar sangre y le dije que era mentira, porque a los que nacen prematuros le sacan sangre para hacer estudios de todo tipo. Yo no me tengo que involucrar en cosas que no son mías".
Las versiones señalaban que la periodista estaba con un pie fuera del programa, pero ella salió desmentirlo. "Recibí mensajes diciéndo que tenía que renunciar, pero tengo un contrato y no puedo hacerlo. Lo acabo de firmar hace poco tiempo y para rescindir un contrato hay que poner un abogado y termino perdiendo yo", disparó.
"En el momento que yo necesité, Jorge (Rial) y Ventura estuvieron en mi vida, tampoco puedo olvidarme de eso. Tengo que ser agradecida. En el momento que ellos la pasan mal, yo tengo que bancar. Me dieron laburo. Y hubo gente, colegas, que me llamaron, pero después me enteré que pidieron mi lugar. Yo no me voy cuando el barco está hundido", concluyó.