Héctor Luis Páez y su hermana María están desesperados. Hace siete meses comenzaron una odisea que los enfrentó con lo más oscuro de la justicia y la medicina de Jujuy.
Su mamá, Palmira Medrano, se sometió a una operación ginecológica de "prevención" que no llevaría ninguna complicación pero cuatro días después falleció. Pocas fueron las explicaciones médicas y para ellos hay cosas que no cierran.
"Mi madre entró de una manera y nos la devolvieron fallecida", denunció Héctor antes de relatar el drama que comenzaron a vivir a partir del 16 de julio del 2014 cuando a partir de un papanicolau que dio como resultado "alteraciones en las células" que podían desembocar en un cáncer, el médico ginecólogo Juan Carlos Núñez le recomendó que lo más conveniente era "operar y sacar el útero".
"Mi mamá lo dudó mucho pero finalmente se decidió. Ella hace unos años había tenido linfoma de Hodgkin, por lo que le daba mucho miedo la posibilidad de volver a tener cáncer", explicó el hombre que trabaja como enfermero en Salta.
"Cuando nos cuenta que se iba a operar, lo dudamos mucho pero respetamos su decisión y la acompañamos", agregó la otra hermana, María. "Nos angustiaba el hecho de que era una cirugía, pero no estábamos preocupados porque se trataba de una cirugía programada", agregó. La operación la realizó el Dr. Núñez en una clínica privada de la localidad Libertador General San Martín del departamento de Ledesma, en Jujuy.
Sin embargo las cosas no salieron como pensaron. Los cuatro días posteriores fueron verdaderamente trágicos, informó MinutoUno.
Héctor, detalló que aunque la operación había sido programada, la realizaron 10 horas después. "Eso ya nos resultó raro. Cuando salió, los médicos dijeron que estaba todo bien. De hecho, los estudios previos dieron bien que no presentaba problemas renales, ni pulmonares ni cardíacos", agregó.
Los familiares resaltaron que a las ocho de la noche, aproximadamente la madre salió del quirófano, que no la pudieron ver y que el médico les informó que durante la cirugía había perdido mucha sangre, que en el momento de la operación provocó una hipotensión por lo que tuvieron que hacerle una transfusión de sangre y que quedaría internada en terapia intensiva y que luego pasaría a sala. "En la operación le extrajeron el útero y los ovarios", explicó.
Al día siguiente cuando pudieron verla, la notaron hinchada, que algo no andaba bien. "Me di cuenta que tenía algo raro, al poco tiempo nos dijeron que le tenían que hacer diálisis. ¿Qué tenía que ver los riñones en su operación? Nunca nos pudieron explicar. Accedimos a pagar un monto de $1300 para que le hagan el procedimiento. Pero a medida que pasaba el tiempo iba empeorando", agregó Héctor.
Dos días después, Palmira presentaba deficiencias respiratorias por lo que tuvieron que entubarla. Y a las pocas horas, sufrió un paro cardiorespiratorio y murió.
"En ese momento el médico nos dijo que tenía cáncer que por eso murió. Pero, cuando a alguien lo operan por un riesgo de cáncer, antes se realiza una biopsia. No le hicieron nada de eso a mi mamá ni dijeron que tenía eso. Por eso creemos que hicieron algo mal que la mató", aseguró Héctor.
Apenas se enteraron del fallecimiento de su madre comenzaron con la respectiva denuncia que está estancada en la Fiscalía N°9 de Investigaciones de San Pedro de Jujuy porque las autoridades judiciales no avanzan.
"Hace siete meses de esto y ni siquiera nos dieron los resultados de la autopsia. No quieren hacer nada. Es una injusticia", relataron los familiares que esperan saber qué pasó con su madre.