En el marco de la Campaña de Concienciación sobre el cuidado del Medio Ambiente que desarrolla la Municipalidad de Crespo, desde hoy se dispondrá de un contenedor en el hall del municipio para que los vecinos depositen sus ecoladrillos. Desde la Secretaría de Servicio Urbanos y Medio Ambiente, Raquel Gorostiara, explicó que “desde que se inició la campaña Ecoconstructores, en el mes de junio, se lograron recolectar alrededor de 4.800 piezas”.
Los ecoladrillos serán destinados para construir un paseo en el Parque del Lago, que está siendo remodelado acorde a esta política medioambiental, en la que se incluye en su refacción el diseño de veredas hechas con tapitas de plástico y la plantación de especies autóctonas, entre otras medidas. Gorostiaga recordó que “para el Paseo del cubo se precisan alrededor de 20.000 ecoladrillos”. Señaló también que todos los miércoles se recibe basura electrónica en la Municipalidad y también ecoladrillos que la gente acerca.
Se están llevando adelante diferentes campañas de educación ambiental y en este sentido trabajamos con todas las escuelas primarias. Se les hizo entrega de un folleto explicando cómo hacer ecoladrillos y un video, y a la vez los chicos llevaron la idea a sus casas para compartirla con sus familias. Además, se sumaron muchos ciudadanos de manera particular para colaborar con esta iniciativa, de Crespo y de localidades vecinas”, dijo, y agregó: “La propuesta, novedosa en la región, cuenta además con el apoyo de organismos municipales. El rediseño del Parque del lago incluye nuevas construcciones que se quieren efectuar con el mismo material, un ladrillo que se cataloga como resistente, aislante acústico, térmico y antisísmico”.
“Este invento fue creado por la organización Pura Vida de Guatemala, y proyecta no contaminar, reutilizar la basura y transformarla en la pieza fundamental en la construcción de casas: el ecoladrillo. Para lograrlo se toma una botella PET y se la rellena a presión con residuos limpios y secos, no reciclables y no peligrosos. De esta manera, desperdicios que contaminarían se vuelven útiles y ayudan a construir algo nuevo”, sostuvo Gorostiaga.
Los recipientes reciclados son utilizados en la construcción de casas, parques, esculturas y centros recreativos. Muchas de las cosas que se tiran a la basura pueden llegar a tardar siglos en descomponerse, como las botellas de plástico, que necesitan alrededor de 700 años.
FABRICACIÓN
Para elaborar un ecoladrillo se debe lavar y secar bien una botella de PET; introducir en la misma residuos reciclables y no peligrosos, que estén limpios y secos, como por ejemplo envolturas de galletitas, snacks o golosinas; cualquier tipo de plásticos y empaques; papel metalizado; poliestireno expandido, como telgopor. No se deben introducir residuos orgánicos, pilas, papel ni cartón; y tampoco elementos cortantes.
Con la ayuda de un palo de madera, cuchara o varilla que entre en el pico de la botella, comenzar a comprimir los residuos alternando al llenado, para no dejar ningún espacio de aire entre ellos. Repetir el proceso hasta lograr una botella lo más compacta posible.
Una vez llena y con el material en su interior bien compacto, tapar la botella. Para corroborar que el ecoladrillo está bien hecho, presionar el envase, si este se deforma, todavía hay que continuar completando con residuos. Entre sus beneficios, se destaca que es un excelente aislante, es resistente y tiene bajo peso.
Fuente: Diario Uno Entre Ríos.