Ya fue realizada en Tribunales la denuncia judicial por la muerte de Miriam Noemí Rearte, que se había presentado por dolores abdominales al Sanatorio Los Alerces, diagnosticándole los médicos cálculos en la vesícula. Ante esto se le dieron dos opciones para proseguir, hacer un tratamiento de unos tres días para desinflamar la zona, o directamente realizar una operación al día siguiente, 30 de noviembre, para resolver todo rápidamente con una intervención menor.
Al elegir la operación, puesto que le traía más seguridad, comenzó el calvario. Luego de una semana de agonía, en la cual sufrió dos paros cardíacos, Miriam falleció. Según declaró el abogado defensor, el médico “hizo lo que tenía que hacer”, ya que realizó con éxito su parte de la operación, por lo cual se deja entrever que la culpa recae sobre la anestesista, que en su defensa dijo que “es la primera vez que le pasa algo así”.
El abogado patrocinante, doctor Marcos Cella, señaló que ya investigaron la historia clínica y la autopsia fue realizada, por lo que están esperando el informe del forense, entendiendo que “si Miriam no se hubiera operado estaría entre nosotros”. Para finalizar, afirmó: “No tenemos dudas que el error estuvo en el acto quirúrgico complejo, era una operación menor”.