"Queda mucho trabajo por delante, como hacer aplicar la ley. Ahora viene el trabajo de denuncia, de reubicación, de cierre de criaderos, pero es un gran comienzo", sostuvo en AM 1330 Jorgelina, de la Red Animalista santafesina a días de la aprobación de la ley que prohíbe las carreras de perros en territorio provincial. En este sentido, la normativa contempla penas para “el que promoviere, organizare o participare en carreras de canes, será reprimido con arresto de hasta treinta (30) días y multa hasta diez (10) jus”. Es la primera provincia en el país en legislar al respecto.
"Va a ser un trabajo pesado pero depende de las personas, de la concientización, y lo importante es que se difunda la realidad del galgo, que es el perro damnificado por excelencia por su estructura anatómica única", expresó la proteccionista, quien manifestó que a los canes se les aplican sustancias para broncodilatarlos y mejorar su performance en las carreras. Estas prácticas incluyen "arsénico, estricnina, cafeína, anfetaminas, por lo general administrados por vía venosa" que deterioran significativamente la salud de los animales hasta provocarles serias mutaciones y la muerte. "Tenemos videos de gente que ha estado en las carreras y ha podido filmar sobre la tortura que se le prodiga a estos animales, y frente a niños, donde está naturalizada esta crueldad", añadió.
No obstante, la aprobación en la legislatura santafesina de esta ley que prohíbe las carreras es un avance importante y un asidero del cual las proteccionistas podrán hacer uso. "Es muy diferente avanzar con una ley provincial que con una ordenanza, como sucedía en cinco localidades de Santa Fe", enfatizó Jorgelina.
Las carreras de canes, principalmente de galgos, así como todo tipo de entretenimiento que involucre animales, denotan la falta de respeto que el hombre tiene hacia ellos, abusando de los mismos para su propia diversión y placer, sin tener en cuenta sus verdaderas necesidades. La mayoría del público que asiste a las carreras, lo hace atraído por las apuestas y sus resultados, y presta poca atención al animal que compite, sin pensar siquiera en ellos. "Habíamos logrado que se los pene con tres días de arresto por apuestas ilegales, cuando no teníamos la ley", indicó la proteccionista en AM 1330.
Muchos de los perros de carreras son sometidos a varias técnicas ilegales para mejorar su “performance”: son drogados, reciben estimulación eléctrica, castigos con látigos y otras “torturas”; pasando la mayor parte del tiempo en jaulas y se les permite salir del encierro sólo para entrenar, competir o hacer sus necesidades. Todos estos animales, después de un tiempo de competir, quedan con temblores motores, estresados y prácticamente destrozados, motivo por el cual son abandonados o sacrificados. "Hemos tenido a cientos de animales a los que tuvimos que amputarles miembros a algunos galgos por sus venas necrosadas, hemos encontrado a otros que no pudimos recuperar que han sufrido estallido de hígado, de corazón o de pulmón", contó en 'Estamos en eso' la integrante de la Red Animalista.
Santa Fe es una de las provincias argentinas con más canódromos y en las calles de sus ciudades se pueden observar galgos abandonados, con un estado de salud deplorable y con claras muestras de haber sufrido maltrato. Si un perro no gana más de dos carreras seguidas, se lo descarta. Esta actividad toma a los perros como objetos descartables, con un fin solamente económico, desconociendo la calidad de seres vivos que merecen cuidado y que han sido y son de vital importancia para la compañía y el desarrollo humano.