Por: Celina Hernández - chernandez@rosario.com - Rosario.com
Rosario.com charló con Luis Machín y se dio el lujo de profundizar en los secretos de este gran actor a la hora de componer los diferentes personajes que su prolífera carrera le presenta.
El protagonista de uno de los comerciales más recordados de la historia de la publicidad en Argentina, "Tapa a rosca", hoy en día es uno de los actores más buscados por productores de teatro, televisión y cine, pero inició su carrera en Rosario, su ciudad natal, y de eso no se olvida.
¿Qué recuerdos tenés de tus comienzos como actor en Rosario?
Recuerdo mucho mis primeros años en Rosario y los maestros que me ayudaron en mi formación: Miguel Franchi, David Edery, Naum Krass, Néstor Zapata, Chiqui González, Pepe Costa y Carlos Schwaderer. También recuerdo a mi directora del Comercial Belgrano, Mireya Bottone, los primeros pasos dados en mi secundaria, la carrera en la Escuela Nacional de Teatro, mis comienzos con la Agrupación Filodramática Te quisimos con locura, las giras con El trencito de Analía, los ciclos de teatro didáctico del Centro Cultural Bernardino Rivadavia, mi primera gira internacional con Cabaretit, el encuentro con el recientemente fallecido Maestro Eduardo Di Mauro, las funciones de El baúl azul con Franchi en las villas de emergencia de Rosario, en las escuelas, las giras en cada pueblo de la provincia de Santa Fe con Malvinas y podría seguir enumerando y los recuerdos se agolpan porque de verdad son muchísimos.
¿Cuándo decidiste irte a Buenos Aires, por qué y cómo fue ese proceso del cambio?
Luego de mi primera gira a España y tras volver sin un peso, pero con una enorme experiencia, empecé a pensar que quizás no era Rosario la ciudad donde iba a poder residir y vivir de la actuación, que siempre fue lo que quise, claro que el paso fue paulatino y muy difícil. Como todo comienzo fue una etapa de adaptación a una ciudad con códigos nuevos y una ciudad que no conocía mi trabajo como actor, claro. Por suerte lugares como el Sportivo teatral de Ricardo Bartís o las clases que tomaba con Alberto Ure en canal 13 me contuvieron y fueron lugares de enorme expansión y crecimiento.
¿Seguís estudiando, tomando clases o entrenándote de alguna manera día a día para los diferentes desafíos actorales que te tocan afrontar?
Para mí, y desde hace muchos años, el mejor entrenamiento es seguir actuando, es lo que me da más recursos y conocimientos. Nuestra profesión, como muchas, se va haciendo en la medida en que se ejerce y yo llevo muchos años ejerciéndola, sin embargo no dejo de sorprenderme ante cada nueva posibilidad de abarcar un nuevo proyecto, quizás a veces me cuesta decidirme pero cuando me embarco sé que va a ser un viaje que vale la pena.
¿Cómo construís o en qué te basás a la hora de componer un personaje? ¿Recurrís a la memoria emotiva? ¿Lo analizás? ¿Te basás en las circunstancias dadas?
La composición de personajes es lo que más me apasiona de mi actividad y me gusta dedicarle tiempo cuando esto es posible. A veces hay ritmos impuestos por la televisión que hacen que uno tenga que decidir más rápidamente un camino a transitar que sea más corto pero no por eso menos intenso. Y cada uno con su particularidad han tenido su complejidad, su dificultad, pero no podría decir que se me resistieron al punto de decir que no pude dominarlos o que me resultaron inabarcables. Cada personaje es un mundo, como las personas. Pero son mundos a crear y ese es el juego que me gusta jugar.
No tengo fórmulas preestablecidas a la hora de componer y cada registro, cinematográfico, teatral, televisivo impone reglas que no son las mismas. En base a esas reglas y confiando mucho en la intuición, que se afina con el tiempo, establezco los límites y los estallidos que pueden tener los personajes tratando de dotarlos de alguna poética que traspase los límites de lo esperable. Claro que estas cosas las puedo decir y pensar tomándome el tiempo que me da la posibilidad de charlar sobre mi tarea, pero es bueno aclarar que en la creación de personajes hay mucho de intuición, de lanzarse a un abismo donde uno no siempre sabe si hay una red fuerte que te contenga. Esto hace de nuestra actividad un estado de inminencia permanente.
Hablanos de "Necrofobia", que se proyectará esta noche a las 0:30 hs en El Cairo Cine Público, en el marco del 21º Festival Latinoamericano de Video y Artes Audiovisuales.
"Necrofobia" me llega después de conocer al director desde muchos años atrás. Siempre él había manifestado su deseo de que yo participe en sus películas pero no encontraba yo el personaje que me diera ganas verdaderas de interpretar. Siempre me gustaron sus guiones y el género de terror me parece un ámbito donde los actores nos podemos sentir muy a gusto dadas las posibilidades de juego que propone.
Y se dio en esta película la posibilidad del encuentro, una verdadera fiesta de comunión en el set, un diálogo permanente del actor con la dirección incluso en el mismo momento del rodaje.
El factor 3 D creo que le suma la posibilidad de ingreso a la historia desde un nuevo lugar, un lugar a ser explorado, es la primera película argentina de terror contada con esta técnica y creo que el público va a saber apreciarla. Intuyo que una mayor cantidad de gente tendrá la curiosidad de adentrarse en un género que todavía no ha dado el salto cuantitativo que se espera que se dé. Pero sobre todo y más allá de la técnica, la gente tendrá la posibilidad de ver una historia con enormes intrigas, un personaje desdoblado y dimensionado en la propia locura y sufrimiento que lo harán tomar decisiones extremas.
Espero del público rosarino una aceptable recepción.
Siempre reciben bien tus trabajos en Rosario, de hecho ahora estás brillando en "Viudas e Hijos del Rock and Roll" y aquí se ve mucho. Contanos sobre eso y los proyectos que se vienen.
Este es un año televisivo para mí. Seguiré en Telefe en "Viudas e Hijos del Rock and Roll" y se está pasando también en canal 9 "El legado" al que le quedan todavía unos capítulos. Este trabajo lo hice el año pasado.
En carpeta sigue estando la adaptación de la maravillosa novela del rosarino Marcelo Scalona "El portador", en cuya adaptación a cine se está trabajando con mucho entusiasmo.
Si todo sigue así el año que viene estaríamos filmando en Rosario "Perros del viento" guión de Hugo Grosso, otro rosarino con quién ya hicimos "A cada lado" y estamos muy contentos con haber terminado el guión y comenzando a conseguir fondos para la realización. En un corto tiempo se estrenará la película "Bienvenido León de Francia" de Néstor Zapata donde hago una pequeña participación pero que espero con mucho entusiasmo.
Si las cosas van en esta dirección más allá de mis trabajos en Buenos Aires, ciudad donde resido desde el año 93, volveré a estar vinculado con Rosario de la manera que me siento más cómodo y realizado que es actuando.