Candela Ramirez - cramirez@rosario.com - Rosario.com
Llega el invierno y, sobretodo, en el centro de la ciudad podemos ver cómo muchas personas duermen en la calle expuestas a bajas temperaturas. Más allá del trabajo que pueda realizar el estado municipal en esta problemática, existen organizaciones que tratan de darle pelea al frío de la calle generando espacios de contención.
Uno de estos espacios es el conocido Refugio Sol de Noche, ubicado en Pje. Marconi 2040 (Itusaingo 5200), zona oeste. El mismo abre sus puertas en la época invernal e intenta ofrecerles a las personas “sin techo” un lugar donde higienizarse, alimentarse y descansar durante la noche. Funciona de lunes a domingos desde las 20 hasta las 7 de la mañana del día siguiente y asisten, en general, personas adultas mayores de 35 años.
Marcelo Giménez, vicepresidente del refugio, contó que el lugar cuenta con plazas para 50 personas: “Estamos completos, pero eso no quita que siempre haya una cama disponible”. Giménez explicó que se hacen recorridas para establecer un lazo, un ambiente familiar, y se los invita al refugio. Allí se les brinda una merienda cuando llegan, una cena y un baño con agua caliente.
El refugio trabaja desde hace ocho años, cuando fallecieron tres personas en la ciudad por pasar frío en la calle. Tiene sus puertas abiertas desde mediados de abril, cuando las noches empiezan a refrescar. Es una asociación civil compuesta por unos 40 voluntarios, y recibe donaciones de particulares y una ayuda mensual del estado municipal, aunque, aclaran, es su único nexo con el ejecutivo.
Giménez expresó que, según sus relevamientos, existen en Rosario entre 200 y 250 personas en situación de calle por más que, señaló, desde la municipalidad hayan manifestado que hay 150.
El mismo número maneja Movimiento de Acción Solidaria (MAS). Un grupo de jóvenes de entre 20 y 35 años, que sale dos veces a la semana a hacer recorridas por distintos puntos del macrocentro llevando comida a personas que viven en la calle.
Desde esta organización no gubernamental se hizo un relevamiento el año pasado que concluyó que había en la ciudad aproximadamente 220 personas bajo esta situación. Sin embargo, para sus recorridas se manejan con el mismo número que la municipalidad: preparan alrededor de 150 bandejas de comida para repartir. De todos modos, Manuel Guillen, integrante de MAS, expresó que esa cifra “es muy fluctuante”.
Guillen, relató que hacen recorridas por cinco zonas del macrocentro al mismo tiempo, dos veces a la semana: la zona de la Terminal y el Hospital Centenario; la plaza San Martín, la facultad de Derecho y la Maternidad Martin; desde Oroño y el río, pasando por el parque España, el Monumento, hasta llegar al Planetario; las peatonales Córdoba y San Martín, enteras; y avenida Pellegrini, desde la plaza López hasta la iglesia de Roca y Pellegrini.
Justamente en esta iglesia, realizan un apoyo escolar todos los viernes. De todas maneras, la organización no lleva ninguna política ni religiosa, solo que cuentan con ese espacio físico para la realización de tal actividad, explicó Guillen.
Los lunes y los miércoles, prosiguió el joven, el grupo se reúne en La Toma para cocinar el menú del día (que varía según sea verano o invierno) y a las 20 empiezan las recorridas hasta, aproximadamente, las 23.
La mayoría de las personas en situación de calle, explicó el joven, se encuentran en el macrocentro de la ciudad y es por eso que abocan sus actividades allí: “En las distintas experiencias que tuvimos en barrios, vimos que no había indigencia”. Es decir, en los barrios más vulnerables quizás no hay personas que duerman en la vereda pero las problemáticas allí son otras.
La mayoría de las personas que ven cotidianamente son hombres de más de 40 años. Muchos viven en la calle desde hace más de 20 años, explicó. También señaló que hay muchos adolescentes de cerca de 18 años que siempre han vivido allí, por peleas con la familia o problemas con las drogas.
Guillen señaló que la mayoría de los hombres que conoció en las recorridas se ganan unas monedas cotidianamente trabajando de cuidacoches.
Desde la ONG se intenta generar un lazo más profundo con las personas que asisten a diario a lo largo de todo el año y hasta han asistido a muchas de ellas ayudándolas a “conseguir pensiones, certificados de discapacidad y trabajo”. “Nunca queda en la bandejita, la bandejita es la excusa”, destacó Guillen y concluyó que el objetivo que se propone MAS a largo plazo es “la inclusión social de la gente en situación de calle”.